Este martes el senado aprobó con 26 votos a favor y 14 en contra, luego de 5 años en el congreso, la ley que contempla el cambio de nombre y sexo registral por vía administrativa para mayores de edad y por tribunales de familia para menores de edad desde los 14 años, incluyendo a personas casadas y migrantes. Sin embargo, se rechazó la inclusión de menores de 14 años, esto dado que se exigía para la votación un quórum de 4/7 que son 25 votos de los cuales se obtuvieron 22 votos favorables y sólo 18 en contra. Vale decir, conforme a la identidad de género personal, poder hacer cambio en los documentos civiles, sin la necesidad de acreditar tratamientos o intervenciones quirúrgicas, cumpliéndose así un derecho humano básico, un avance histórico en esta materia para la comunidad trans en Chile.

Sin embargo, no se alcanzó el quorum para las y los niños menores de 14 años, dejándolos privados a ellos y a sus familias de poder llevar una vida cotidiana normal, los niños trans existen, por más que los políticos conservadores quieran negarlos, seguirán existiendo y con esa exclusión lo único que garantizan es que su infancia esté marcada por la discriminación en los colegios, hospitales y también dentro del hogar, promoviendo con esta política, que el suicidio infantil continúe.

Desde el MIT y la LIT-CI saludamos la lucha que está dando la población LGBTI de Chile, por exigir el derecho que nos han negado los distintos gobiernos de Latinoamérica y el mundo, a su vez, creemos que es necesario defender y seguir luchando y organizándose junto a trabajadores por la inclusión de niñes y ampliar la ley a identidades no binarias. Además de exigir justicia efectiva y popular para los crímenes de odio, los cuales continúan sucediendo contra la comunidad LGBTI hoy.

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